Tus 5 sentidos, mi Estrategia: Descubre el Marketing Sensorial

El tema que vamos a tratar hoy es peculiar, porque creo que es una parte del marketing que no se trata mucho y es muy importante.

Concretamente comentaremos el marketing sensorial, un tema que me inspiró a tratar una persona muy especial para mí, ya que es muy curiosa, amante de conocer nuevos temas y muy atento a los detalles que le rodean. Concretamente me pregunto: “Veo que tratas aspectos como la importancia del texto, las imágenes, pero… ¿y los sonidos?

La cuestión es que este tema ya lo tenía en la cocina, pero esa frase me hizo darme cuenta de que tenía que salir a la luz antes de lo que tenía planteado, porque puede que tenga una incidencia más directa en el usuario del que inicialmente pensábamos.

Pues bien, aquí estamos, para hablar no solo de sonidos, sino de cómo afecta el marketing a nuestros 5 sentidos. Pero ¿Qué es el marketing sensorial? Es el arte de seducir los sentidos para que cada experiencia consiga dejar en el cliente, una huella emocional inolvidable. Va más allá de vender, ya que busca enamorar al cliente a través de aromas, sonidos, sabores, texturas y colores perfectamente diseñados para captar su atención y fidelidad.

Es decir, vamos a focalizarnos en los 5 sentidos del cliente, para lograr influencia en su decisión de compra. ¿Cómo logramos hacer esto, como podemos apelar a los diferentes sentidos con nuestras acciones de marketing?

• Vista: empleamos diferentes colores aprovechando el gran poder de la colorimetría, además de un cuidado diseño visual para atraer al cliente.
• Oído: influenciamos el cliente a través de la música y generamos sonidos específicos en la percepción de la marca.
• Olfato: impactamos a través de los aromas en la evocación de emociones y recuerdos.
• Gusto: creamos conexiones emocionales a través de sabores.
• Tacto: buscamos un hueco en la memoria del cliente a través de las texturas y materiales en la percepción de calidad.

Como hemos visto, cada pequeño gesto puede tener un alto impacto en el usuario y sus sentidos. Con la atención en estos detalles que, a simple vista pueden parecer pequeños, podemos impulsar la experiencia del cliente, creando unas interacciones con nuestra marca mucho más potentes y memorables.

Existen muchas marcas consolidadas que tienen piezas en su comunicación que las convierten en inconfundibles. Algunos ejemplos pueden ser el de Coca Cola con su color rojo; el jingle de “I lovin’ it” de McDonald’s; el olor característico de tiendas como Stradivarius o Zara; el packaging que emplea la marca de Apple para sus productos, para influir en la percepción que tenemos de su calidad, etc.

Como vemos, el tema del marketing sensorial no es algo nuevo, y hoy en día puede ser más sencillo impactar en el usuario, gracias a la multitud de herramientas y nuevas tecnologías que conviven en el mercado. Es una forma muy potente de fidelizar al usuario, ya que nos centramos directamente en la experiencia de los clientes, evocando sensaciones, recuerdos, sueños, objetivos imaginación, etc.

No obstante, es cierto que el formato digital nos puede limitar el potencial del marketing sensorial, ya que perdemos la interacción directa con el cliente y no tenemos la oportunidad de apelar a sus 5 sentidos. Sin embargo, hay otras formas de lograrlo, como pueden ser la utilización de realidad aumentada o realidad virtual. De este modo, conseguimos estimular los sentidos, aunque sea de una forma indirecta. Como conclusión, incluye el marketing sensorial en tu estrategia de comunicación, ¡no te quedes en la superficie porque podrías estar perdiéndote mucho!

Recuerda que “El cuerpo humano es capaz de recordar el 1% de lo que toca, el 2% de lo que escucha, el 5% de lo que ve, el 15% de lo que degusta y un 35% de lo que huele”.

Son cifras que no debemos perder de vista, ya que el consumidor actual siempre está buscando saciar su inconformismo, no basta con ofrecer un producto con una imagen y un precio adecuado, hay que ir mucho más. Y lo cierto es, que ¡se puede!

Y tú, ¿Cuántas veces has oído una canción, sentido un olor o visto un color, y te ha llevado a pensar en una marca en concreto? Seguro que la respuesta es «muchas veces«. Ahora ya puedes entender un poco mejor esta estrategia y porque es tan efectiva.

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